Según otro estudio realizado por el Centro Internacional de Investigación sobre Cáncer (IARC), publicado en la revista American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine, que recopila los resultados de 11 investigaciones previas, los trabajadores que pasan años expuestos a humos de motores diésel son un 31% más propensos a padecer un cáncer de pulmón que los no expuestos.
El cáncer y el taller
Los anteriores riesgos y las enfermedades expuestas son un ejemplo de los muchos riesgos a los que están expuestos los profesionales del mantenimiento y reparación de vehículos, que se deben tener en cuenta para llevar a cabo las medidas preventivas más eficaces con el fin de proteger la seguridad y salud de estos trabajadores.
De este modo, tres de las principales medidas que debemos tener en cuenta en cualquier actividad en general y en esta en particular son: Formación e información al trabajador y una correcta vigilancia de su salud. En este sentido, la patronal madrileña de talleres Asetra colabora con el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) con el objetivo de aportar a sus talleres asociados informaciones adicionales y directrices preventivas. De una forma más concreta, participa en la campaña del INSST contra el cáncer laboral.
En línea con esto, la asociación ha querido advertir de las sustancias, mezclas y procedimientos considerados cancerígenos tras una reciente modificación normativa española:
- Trabajos que supongan exposición cutánea a aceites minerales previamente utilizados en motores de combustión interna para lubrificar y refrigerar los elementos móviles del motor. En este caso el real decreto establece una posible contribución importante a la carga corporal total por exposición cutánea.
- Trabajos que supongan exposición a emisiones de motores diésel: el nuevo real decreto establece un valor límite de exposición diaria de 0.05 mg/m3 en fracción respirable. El valor límite se aplicará a partir del 21 de febrero de 2023.
Cómo evitar la exposición a agentes cancerígenos
Por otra parte, la patronal no ha querido dejar de ofrecer sus recomendaciones y señalar las obligaciones del taller para cumplir con la normativa tras la citada modificación:
- Contactar con el servicio de PRL ajeno para una evaluación de riesgos conforme a dicha modificación normativa.
- Mantener una adecuada ventilación en el taller.
- Utilizar de equipos de protección personal, como por ejemplo guantes, y la retirada y limpieza de la ropa contaminada.
- Disponer las hojas de datos de seguridad de los productos utilizados actualizadas y ponerlas a disposición de los trabajadores para su consulta.
Cabe recordar que el INSST ha incorporado por primera vez a los talleres en una campaña de prevención del cáncer en el entorno laboral este año. Y lo hace tras la publicación en el BOE y su posterior entrada en vigor del Real Decreto 427/2021, de 15 de junio, por el que se modificaba el Real Decreto 665/1997, de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo.
Como ya comentamos entonces, la Prevención de Riesgos Laborales en el taller es fundamental para preservar la salud de los trabajadores. No en vano, cumplir la normativa, no sólo evita sanciones, también impacta de manera positiva en la productividad del taller al reducirse el riesgo de la incidencia de bajas laborales en el equipo humano del taller.
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