La debilidad del mercado automovilístico y el alargamiento de la crisis económica, derivada de la sanitaria, está pasando factura a los concesionarios. Y es que los puntos oficiales de venta y reparación de vehículos han sufrido rentabilidades negativas en el primer trimestre que pueden provocar pérdidas a los negocios. Un empeoramiento de los resultados que se produce a pesar del recorte de gastos logrado por las concesiones en este periodo, según datos de Snap-on Business Solutions.
Tras un cierre de 2020 en positivo, la rentabilidad de los centros de distribución de vehículos ha caído a cifras negativas por la incertidumbre provocada por la pandemia del coronavirus, después de que la facturación total también haya bajado un 7,26% respecto a los tres primeros meses de 2020.
De este modo, y con las cifras de matriculaciones de vehículos nuevos en caída libre (alrededor del 40%), la rentabilidad media de los negocios marquistas se quedó en el -0,68% en el primer trimestre. Esta cifra empeora incluso los datos tanto del primer como del segundo trimestre del ejercicio pasado en los que la rentabilidad (Beneficios antes de impuestos sobre facturación), cayó hasta el 0,52 y 0,28%, respectivamente.
Cabe recordar que los concesionarios españoles cerraron 2020 con una rentabilidad positiva sobre la cifra de negocio del 1,15%, nueve décimas menos que en 2019, con caídas generalizadas en la rentabilidad tanto en el área de Ventas (-15,06%) como de Posventa (-13,71%).
¿Y cómo les ha ido en el arranque de 2021? Por áreas de negocio, la rentabilidad del área de Ventas en el primer trimestre se situó en un -14,41%, mientras que la de Posventa en un -8,2%, también en cifras negativas. Todas ellas mitigadas, en parte, por la reducción de los gastos generales, en un 6,5%.
Todas las áreas en negativo
De este modo, según Snap-on, el arranque del año no ha sido positivo para los concesionarios, que siguen viéndose muy afectados por los efectos derivados de la pandemia y la incertidumbre generada. Dos condicionantes a los que se ha unido un tercero: la escasez de semiconductores, que también está teniendo su efecto sobre el sector.
El área de Ventas ha sido la más perjudicada en este primer tramo de 2021, pasando de representar un 55% de la contribución al resultado final a cierre de 2020 a solo un 41%. Y eso que las ventas suponen el 82,2% de la facturación de estos negocios.
En este sentido, el área de Posventa está teniendo un mejor comportamiento a pesar de la caída de su rentabilidad. Por un lado, el negocio de Recambios, a pesar de significar apenas el11,54% de la facturación, contribuye al resultado final un 44,27%. Mientras, el área de Taller aporta un 14,4% al resultado final, cuando apenas participa del 6,26% de la facturación total de estos negocios.
Y es que, como decíamos, la Posventa marquista ha tenido un mejor comportamiento que la venta de nuevos (VN), y muy similar a la venta de usados en el primer trimestre de 2021. En concreto, mientras la cuenta de explotación de la venta de VN cayó un 0,52% frente a un año antes, la de la venta de VO creció un 0,62%. Una tendencia similar se produjo en posventa, tanto en los Recambios (+0,55%) como en el área de Chapa y pintura del taller (+0,84%). Sólo el área de Mecánica (-1,98%) tuvo un comportamiento negativo de su cuenta de explotación en el periodo de enero a marzo.
Gestión eficiente, taller eficiente
Con el coronavirus y sus efectos incuestionables en la posventa de automoción más allá de la pandemia, la gestión eficiente del negocio de reparación, ya sea marquista o multimarca, será aún más importante y para ello contar con las mejores herramientas y partners será crítico.
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